Deja de trabajar y vivir para evitar el fracaso, trabaja y vive para conseguir el éxito.

La forma cómo interpretas la palabra “fracaso”, determinará en gran parte cómo vivirás tu vida y cuál será tu estilo para trabajar.

Si tu creencia es que el fracaso es algo malo y negativo, sospecho que tu naturaleza será una donde intentarás evitar lo más posible situaciones y oportunidades que involucren ese posible fracaso y por ende tu tendencia e inclinación hacia el riesgo será bastante pobre.

Ahora, si tu definición de la palabra “fracaso” es una en donde crees que el fracaso al  final de un camino es algo positivo – incluso un gran maestro, por todo lo que aprendes precisamente por haber fracasado –  entonces es más probable que estarás dispuesto a arriesgarte y te aventarás con mayor frecuencia.

Ojo: No dije que te arriesgarás siempre, ni que te aventarás imprudentemente. Dije que estarás dispuesto a arriesgarte y a aventarte más.

Te sugiero ver el fracaso como lo que verdaderamente es: un evento. No es una persona. Es decir, cuando fracasas simplemente quiere decir que fracasaste en algo, no significa que eres un fracasado en todo lo demás.

Te lo comento porque a través de los años he visto demasiados vendedores vivir y trabajar por debajo de su verdadero potencial esencialmente por tener una filosofía en donde su prioridad es evitar el fracaso, en vez de tener como principal enfoque buscar el éxito a pesar de que existe el riesgo de un posible fracaso.

Con eso en mente te animo a reflexionar ¿cuáles son tus creencias al respecto? ¿Qué nivel tienes para tolerar el riesgo?

¿Eres ese perfil de persona que a toda costa evita el fracaso, el riesgo, lo desconocido, el regaño, la incomodidad, el rechazo, el error, el regaño y el hacer el ridículo? O, ¿eres el perfil de persona que intentas conseguir el logro y el resultado a pesar de que en el camino puedes tropezar y caer?

Recuerda: cuando vas por el camino de tu vida y te tropiezas y te caes, eso no se llama “fracaso”. Eso se llama aprendizaje. El fracaso sería – al tropezarte y caerte – permanecer tirado y no pararte para seguir por tu camino e intentarlo de nuevo.

Esta creencia es sumamente importante. Porque en el maravilloso mundo de ventas (así como en tu vida, día a día), estarás constantemente expuesto al riesgo del posible fracaso para poder conseguir y lograr los éxitos. Pero si te obsesionas en tratar de evitar ese fracaso, rara vez encontraras esos éxitos que dices que tanto quieres.

Estás obligado a aventarte e intentar lograr el éxito a pesar de que también existe la posibilidad de perder. ¿Por qué? Porque tu realidad es ésta: el éxito ocurre debido a que precisamente haz fracasado anteriormente y como resultado, te convertiste en una persona y un vendedor más fuerte, más conocedor y mejor preparado por haber vivido fracasos previos.

Dudo que conozcas a alguien exitoso que jamás fracasó. Yo no. ¡Al contrario! Toda persona exitosa que conozco carga el peso y tiene las cicatrices de fracasos anteriores. Por eso se han convertido en quienes son.

Que te quede claro: La vida de ventas no está diseñada para darte lo que necesitas. La vida de ventas está diseñada para darte lo que mereces con base en quién te has convertido.

Reflexiona en quién te estás convirtiendo, porque la persona que desarrolla el hábito y la creencia de temer, buscando evitar el fracaso al punto de estancamiento y parálisis, se convierte en un conformista, mediocre y resignado a aceptar lo que tiene como lo mejor que puede obtener.

Conclusión: ¡Por tu bella y Santa Madre aviéntate más! Porque todo en ventas tiene riesgo ¿Cómo quieres conseguir el éxito si no quieres aventarte más?

Te reitero: Todo en ventas involucra un riesgo. ¿No me crees?  Lee esto:

Saludar a alguien en la bienvenida tiene un riesgo a ser rechazado y hasta sentirte ofendido, sin embargo te tienes que aventar a pesar de eso.

Interactuar con el cliente en la consulta y en la detección de sus necesidades o en la presentación del producto tiene un riesgo a ser superado en conocimiento o ignorado, y sin embargo te tienes que aventar a pesar de eso.

Ofrecer y persuadir con beneficios al clientes para hacer la prueba de manejo involucra enfrentar el riesgo de ser refutado o pospuesto, pero te tienes que aventar a pesar de eso.

Manejar objeciones te exhibe al riesgo de lo desconocido, a la incomodidad y al error, pero te tienes que aventar a pesar de eso.

Al entrar en la negociación y el cerrar te expone ante el riesgo de ser rechazado y cuestionado. Pero te tienes que aventar a pesar de eso.

Dar seguimiento y prospectar indudablemente te abre la puerta al rechazo y a ser ignorado y postergado, pero te tienes que aventar a pesar de eso.

Todo en ventas involucra un riesgo y te tienes que aventar a pesar de ello.

Quizá no controlas todo lo que ocurre en tu ciclo de ventas o en tu vida. Pero si controlas completamente tus creencias y tu estado mental. Dado eso, más vale que desarrolles la fortaleza mental y la creencia que a pesar del riesgo al posible fracaso, te beneficia más dejar de trabajar y vivir para evitar el fracaso, mejor trabaja y vive para conseguir el éxito.

Recuerda: Tu éxito es tu responsabilidad.

Nos vemos en la trinchera.

Graham