A mi no me digas…

imagencentral-084

A mi no me digas que quieres ganar más dinero, ser más feliz y que pretendes cambiar tu vida, cuando la neta, no estas haciendo todo lo necesario para realizar precisamente los cambios que dices que deseas tanto. No solamente eso, pero sospecho que llevas años o décadas diciendo lo mismo, ¡pero no haciendo lo necesario!

¡No confundas deseos con decisiones! Deseos son sueños no realizados. Decisiones son pensamientos que conviertes en un compromiso irrevocable, mismo que  manifiestas  a través de tus acciones. Es decir, lo vives y se llama ser congruente.

¿Quieres ganar más dinero?, ¿De verdad? Pues ya sabes que hacer: ¡Vende bien, vende más, vende mucho más y vende constantemente! Eso requiere que, entre múltiples y varias cosas, conozcas a tu producto y sepas venderlo a nivel experto. No a nivel amateur. Dije a nivel experto. ¿Por qué? Porque está comprobado que cuando conoces más y mejor – y lo aplicas – vendes más y mejor. Punto.

Sabes que la mayoría de los vendedores que me dicen que quieren ganar más dinero, no conocen su producto por lo menos al 50%, ni saben como venderlo ¡y se quejan que no venden y que no ganan bien! ¿No es absurda esa lógica? Y ese es un ejemplo de miles.

Si fuera cierto que quieren ganar más, entonces, ¿por qué no se dedican y se comprometen a aprenderse su producto un poquito cada día, en vez de chatear, taquear y coquetear?

¿Por qué no salen a investigar a la competencia y a observar a otros vendedores como venden, en vez de tratar de vender chamarras, vitaminas o perfumes desde la cajuela de su auto?

¿Por qué no buscan respuestas y soluciones ya sea por internet, comprando unos libros o tomando unos cursos por su propia cuenta, en vez de esperar y depender del corporativo o del jefe para su crecimiento y mejora profesional y personal?

¿Por qué enfocan sus energías y esfuerzos en justificar su bajo desempeño y resultados culpando al mercado, al jefe, al fabricante, al inventario y hasta a sus broncas en casa, en ves de aceptar la responsabilidad de su vida, su actitud, su mejor esfuerzo y su éxito?

Seamos francos. Si realmente quieres ganar más dinero, lo que acabo de ejemplificar no es amigable a tu bolsillo porque está enfocado en dar excusas y razones, no en dar resultados a pesar de todo, y peor aún – lo sabes desde siempre.

parafrasis-graham-084

Que te quede claro: Te van a medir (tanto en tu trabajo como en tu casa) por tus resultados no por tus razones “del porque no” o por tus “buenos intentos”. Dado eso compra este hecho hoy y para siempre: Por real o legítima que sea tu excusa y pretexto, jamás substituirán al resultado. ¡Jamás!

A mi no me digas que lo más importante en tu vida es tu familia, ya sean tus maravillosos hijos, tu bella y santa madre o tu querida pareja, cuando en realidad no estás haciendo todo lo que está a tu alcance en el trabajo para mejorar la vida de tus seres queridos. (Ojo: dije haciendo. No dije diciendo.)

¿Cómo me puedes decir que harías y darías todo por ellos (¡hasta dices que darías tu vida!), cuando ni si quiera te partes el queso y ni sudas en el trabajo por ellos? Al contrario. Sospecho que tu hábito es simplemente cumplir con lo mínimo requerido y hacer “lo suficiente”. ¡Ubícate! Lo suficiente nunca es suficiente.

¿Cómo me dices que tus seres queridos son lo más importante para ti, si cuando al llegar a tu casa no los pelas, prefiriendo perderte en la tele o con los amigos, en vez de tener una conversación real y substantiva con alguien de tu familia y sencillamente convivir con ellos?

¿Cómo justificas el hecho de que falta lana en casa y que estás muy consiente de las carencias materiales que vives y que te exige tu pareja o tu nivel de vida, pero tu única solución (que por cierto ya está muy trillada desde hace años) es “echarle ganas”?

Si el traje que describo te queda, te pregunto: ¿Cómo te ves en el espejo cada día y cómo lo justificas?, ¿cómo continuas haciéndolo, aún cuando sabes que no funciona? ¿cómo?

¡Esto debe ser totalmente inaceptable para ti! Por lo tanto ten cuidado. Porque si estás dispuesto a aceptar lo inaceptable, eso es ser mediocre.

A mi no me digas que cada día estás haciendo tu mejor esfuerzo cuando llegas tarde, te vas temprano, te vas de pinta en vez de prospectar, buscas atajos en el proceso de la venta, no practicas, coyoteas, pirateas, flojeas, no das seguimiento, no ayudas a los demás y hasta te guardas ventas para el próximo mes.

¿Verdaderamente crees que tu mejor esfuerzo es no cumplir y no llegar a tu máximo potencial?, ¿Crees que el no florecer tu talento innato y tus habilidades es lo que te va dar el éxito, la felicidad y todo lo de más que quieres en tu vida? ¿De verdad crees eso? ¿En qué planeta vives?

A mi no me digas que tu actitud es positiva, cuando no cumples lo que acuerdas y lo que prometes, pero bien te molestas si alguien te lo hace a ti.

A mi no me digas que eres positivo cuando no te comprometes, no eres dedicado, te rindes a la primera y te quejas de lo que no tienes, no te dan y el por qué no te valoran; en ves de ser persuasivo, perseverante, agradecido de quien eres y de lo que tienes y enfocarte en crear más valor en ti.

Te repito:

A mi no me digas que quieres ganar más dinero, ser más feliz y que pretendes cambiar tu vida, cuando no estas dispuesto a hacer las pequeñas cosas y mejoras en tu vida para obtener los grandes cambios que quieres (y necesitas).

Por ti – no por nadie más – por ti, comprométete a cambiar hoy y cúmplelo a pesar de todo, porque tu realidad es que nadie lo va a hacer por ti.

Ah, y  una cosa más: ¡A mi no me lo digas!

¡A mi, muéstramelo!

Recuerda: Tu éxito es tu responsabilidad. ©

Nos vemos en la trinchera.

Graham

13 Comments

Add a Comment

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *